La lechuza de Minerva (o el mochuelo de Atenea)
Es insensato creer que alguna filosofía se puede anticipar al mundo presente. Cuando dice una palabra sobre la teoría que explica cómo ha de ser el mundo, la Filosofía siempre llega demasiado tarde: como pensar sobre el mundo, surge en el tiempo, después de que la realidad ha cumplido su proceso de formación y se halla realizada. Cuando la Filosofía pinta al claroscuro un aspecto de la vida, ya envejecido y en la penumbra, no puede ser rejuvenecido, sino tan solo reconocido: la lechuza de Minerva inicia su vuelo al caer el crepúsculo. (Hegel, fragmento del prólogo de su obra Filosofía del Derecho)
El papel del mochuelo (Athene noctua) como símbolo de la sabiduría procede de su asociación con Atenea. En la mitología griega, Atenea -o Atena- es la diosa de la sabiduría, la estrategia y la guerra justa. Fue considerada una mentora de héroes y adorada desde la Antigüedad como patrona de Atenas, donde se construyó el Partenón para adorarla. Fue asociada por los etruscos con su diosa Menrva y, posteriormente, por los romanos con Minerva, que hereda las potencias de Atenea, además de ser considerada la protectora de Roma y la patrona de sus artesanos.